viernes, 7 de diciembre de 2018

FIESTAS

Odio las fechas especiales como la navidad, es una época de amor y odio que me genera un malestar que sube y baja a medida que los otros están celebrando y son muy felices, ¿Acaso no puedo yo ser igual de feliz? La respuesta que siempre me doy es no y caigo en una tristeza que me impide salir de la cama y empiezo a llorar por todo lo malo que me ha pasado y a comparar la felicidad de los otros con la mía propia.
Amo esta época en la medida que veo la felicidad y genera en mí deseos de compartir y dar, tener amor hacía mi familia y amigos; pero el hecho que realmente la odie es que mi familia no es de esas familias que se reúnen a celebrar algo:por ejemplo el 24 de diciembre, solo estamos mis padres y antes mi hermana con una cena tranquila y a dormir a las 10pm, ¿Por qué se perdió la costumbre de reunir a todos los tíos en una casa y celebrar? No sé, creo que las personas se cansan o pelearon. Aunque también me acuerdo que los únicos regalos que recibí en mi vida fueron un oso, una barbie y un juego de té; cuando te comparas con los regalos de los demás niños (Realmente te comparas a la fuerza porque te presumen todos los juguetes) sientes una inferioridad tal que a medida que pasan los años y creces te conformas con una época vacía, de ver películas, cenar algo en familia y después ir a la cama a ver las redes sociales y lo que tus amigos comparten con su familia (Ahora una comparación que tu haces).
Pues bien, ahora me siento demasiado débil e infeliz al no poder estar con mi familia aunque sea para una cena, ver películas y poder prender por media hora velitas afuera de tu casa que ha estado en obra negra por más de 25 años.
Y si mis lágrimas cuando estaba pequeña era por no tener dinero y sentirme insignificante, ahora son por estar en una soledad tan profunda que me ahoga cada vez más que miro mis errores y no tener a mi familia a mi lado para crear recuerdos (Aunque sé muy bien que mi educación debería ser importante, los sentimientos de soledad son peores que mis ánimos de estudiar).

Feliz navidad,
Keyla.