Las tardes se seguían
Una tras otra
Y la esperanza se iba
Sin poder detenerla...
Miraba las cuentas
Que lucían resplandecientes
Y manchadas de sangres
La presión no había sido liberada
Los cables se habían soltado
La cabeza salió volando
Con sus esperanzas
Sus sueños
Su peinado perfecto
La razón de mi despertar
Se había suavizado
Ya estaba feliz
Y ella muerta
LS
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