Un cuento de paz

Existía en un mundo muy lejano, la agonía de la guerra, esta llevaba siglos en existencia y hacía que las personas que vivían en ese lugar fueran infelices, no vivieran tanto y su vida fuese miserable. Al mismo tiempo, toda la belleza del paisaje había decidido morir: los árboles ya no daban la suficiente comida, habían perdido el follaje y simplemente daban lo necesario para que las personas comieran una vez al día. El cielo también se había vuelto amarillo y los amaneceres y atardeceres ya no eran lo mismo. Las personas morían tan jóvenes, que ni tiempo de soñar más allá de la guerra tenían y había llegado un punto en el que nadie se acordaba como era vivir sin ese paisaje, las armas, bombas y los conflictos. ¿Por qué razón había iniciado el primer conflicto? ¿Por qué llevaba tanto tiempo el mundo enojado?

Solo los libros sabían el inicio de la guerra y la mayoría de estos habían quedado destruidos. 

Sin embargo, los jóvenes que habían crecido con grandes dificultades, consideraban inútil el ejercicio de la guerra y no comprendían porqué tenían que dar su vida por una nación que los hacía aguantar hambre, los obligaba a reproducirse sin amor y luego desechaban sus cuerpos en fosas comunes cuando morían. Eran ellos los que habían leído sobre la paz y lo expresaban como todo aquello que no tenían: La brisa limpia de la mañana, la imagen de un lago limpio y las flores en campo abierto. 

Es por ello que muchos se reunieron y trataron de averiguar entre todos el inicio de la guerra: ¿Era necesario dar sus vidas por algo que ni siquiera sabían por qué lo hacían? Y fue así que encontraron a la persona más anciana del lugar, un hombre con 30 años que se había pasado la mayor parte de su vida cojo y esta discapacidad lo había salvado de la guerra, él guardaba los libros que relataban el inicio de todo y el de varias guerras en otros momentos, que habían durado  menos y donde la paz había traído la paz con la que él soñaba. Se había planteado muchas formas de resolver el conflicto, ese conflicto que había durado siglos por una pelea entre dos gobernantes. Una guerra inútil cuando dos jefes de estado se habían herido profundamente el ego, tanto así que atentaron contra la vida de sus ciudadanos con tal de elevar la autoestima que la contraparte había macerado. 

Todo el mundo llevaba siglos peleando por el ego de dos cadáveres, aunque eso no lo repetía la población, esa había sido la causa real. Así que los jóvenes al enterarse de aquello, tomaron las ideas del anciano y simplemente dejaron las armas contra sus enemigos. Ya sin nadie que peleara, la guerra se acabaría. No obstante, habían ciertos jóvenes con ideas profundo de odio y con ellos y un Gobierno cruel, arremetieron contra los que llevaban un mensaje de paz. 

Al final de todo, la paz no pudo triunfar en una sociedad muy enojada, dado que sus ideas eran pobres y olvidaron las claves de paz de los libros que jamás leyeron y fueron quemados: El diálogo entre dos partes en un conflicto es la mejor vía para evitar continuar con el resentimiento o los sentimientos negativos que fomentan la guerra. Y aunque en el mundo de muy muy lejano todos murieron por la violencia, ese conflicto sirvió de motivación a otros mundos: La violencia sin sentido y el odio llevan a la aniquilación así se tengan buenas intenciones. 

FIN